La calle Corredera fue el escenario elegido un año más por el equipo de Gobierno para inaugurar el alumbrado extraordinario de Navidad y con ello llenar de ambiente la que ha sido siempre la zona más comercial de la ciudad, aunque hoy día esto sea más que cuestionable. No obstante, se trata de la entrada natural del casco antiguo donde estos días se han concentrado varios actos navideños.
El equipo de Gobierno se hizo acompañar de los Reyes Magos a la hora de accionar el botón que iluminaría la calle, así como de dos vecinos de Arcos con discapacidad, José Luis Navarro y Desiré Tardío para el simbólico encendido. El alcalde, Isidoro Gambín, aprovechó para dejar constancia ante la prensa de la cantidad de actos que desde el Ayuntamiento y otros colectivos locales se han organizado para dar contenido a los días navideños, sobre todo zambombas para exaltar esta manifestación declarada Bien de Interés Cultural de Andalucía. Además, se refirió a los cambios que experimentará la próxima cabalgata de reyes aprovechando la presencia de Sus Majestades en el acto. Gambín diría que estos cambios no son para “fastidiar” a nadie, sino para engrandecer el evento.
Además, el encendido del alumbrado se completó con una nevada artificial con la que arcenses y visitantes evocaron por unos instantes una imagen que poco tiene que ver con una tierra en la que no nieva desde mediados del siglo XX, pero que ayuda, no obstante, a crear ambiente. El espectáculo visual fue admirado por cientos de personas que llenaron la calle Corredera para un momento emotivo.
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